Tras la votación en el Senado argentino dando luz verde a la legalización del aborto hasta las 14 semanas y su consiguiente impacto en toda América Latina, aún mayoritariamente pro-vida, Bolsonaro ha expresado que lo lamenta profundamente “por las vidas de los niños argentinos, ahora sujetos a ser abortados en el vientre de sus madres, con el consentimiento del Estado«. “Mientras dependa de mí y de mi gobierno, el aborto nunca será aprobado en nuestra tierra. Siempre lucharemos para proteger la vida de los inocentes«.